Rosemary Noronha, acusada de corrupción, fue destituida la semana pasada por la presidenta Dilma Rousseff.
SAN PABLO. AFP, ANSA Y CLARIN - 02/12/12
La investigación sobre la compleja trama de corrupción que la justicia está llevando a cabo en Brasil dejó al descubierto el presunto vínculo íntimo que el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva tenía con su ex asesora Rosemary Novoa de Noronha, destituida hace una semana, y convirtió el proceso judicial en un escándalo de alcoba. Los medios brasileños dieron detalles escabrosos y la derecha aprovechó para desacreditar la imagen del ex mandatario.
La oposición ya pidió que se presente ante el Congreso para dar explicaciones.
“La relación con Lula explica la influencia de la ex asesora”, afirmó el diario Folha de San Pablo. El periódico señala que todo se descubrió cuando los investigadores encontraron correos electrónicos comprometedores de Noronha, y atribuye la influencia de la ex funcionaria “ a la larga relación de intimidad que mantuvo con Lula ” durante casi dos décadas.
Rosemary se desempeñaba hasta la semana pasada como jefa de la oficina de la Presidencia en San Pablo. La policía la acusó de integrar un grupo de funcionarios que operaban una extensa red de corrupción , gracias al tráfico de influencias. Ante la denuncia, la presidenta Dilma Rousseff no dudó un instante e inmediatamente la destituyó.
La prensa brasileña publicó este fin de semana conversaciones y mails entre los denunciados detectados por la policía, según los cuales Noronha, de 57 años, ejercía influencia para designar a determinadas personas en puestos de gobierno. La revista Epoca, que dedicó su portada al tema, señaló que Noronha “ se presentaba como la novia de Lula y, con eso, nombraba a protegidos, interfería en organismos del gobierno y recibía recompensas”.
Rosemary Noronha, proveniente del sindicato de los bancarios, conoció a Lula en 1993. Un año después se incorporó a la campaña presidencial y la relación se hizo más estrecha, según Folha. En 2003, el sindicalista se convirtió en Presidente y Rose ascendió a “asesora especial” de la oficina regional en San Pablo. Tres años más tarde, por decisión del propio mandatario, subió otro escalón: pasó a ser jefa de Personal. Desde un principio, Marisa Leticia, la esposa de Lula, mostró su desagrado con la mujer .
Durante 19 años la relación de Lula y Rose se mantuvo oculta al público, pero en Brasilia la relación complicó la agenda presidencial, cuenta el diario brasileño. Y agrega: “Cuando la entonces primera dama Marisa Leticia no acompañaba a su marido en los viajes internacionales, Rose era parte de la delegación oficial ”.
En este tiempo, Rosemary dejó dos maridos en el camino y se construyó una reputación de mujer difícil y de temperamento agresivo. Se dice que Lula recibía constantes quejas de sus amigos sobre el tratamiento que les daba a los empleados. Un episodio representa esta situación: un trabajador contó que, enojada porque el piso de su oficina no tenía la pulcritud deseada, se lo hizo limpiar 20 veces seguidas hasta que se dio por satisfecha.
Hacia afuera era muy discreta, no le gustaba el contacto con la prensa. Hacia adentro, manejaba muchos de los hilos del poder.
En ceremonias y fiestas controlaba el sector VIP, decidiendo quién podía acercarse al ex mandatario. En la etapa en que Lula estaba bajo tratamiento contra el cáncer en el Hospital Sirio Libanés, Rose lo acompañaba, pero sólo cuando no estaba cerca Marisa Leticia.
http://www.clarin.com/mundo/Rumores-relacion-Lula-funcionaria-procesada_0_821317952.html
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